Hay que mirar con atención ese puente de ‘Capricho’ (en Madrid, Metro El Capricho); ¡dice tanto!
Lo vamos a utilizar subiendo desde la sombra, fin de año litúrgico, para dirigirnos a la luz. En nuestras casas-comunidades estamos afanosos con nuestro entorno y con Diciembre, por decirlo de alguna manera: Navidad, una Asamblea-Capítulo, primer paso aguerrido a un Capitulo General que, aquí en España, hace par con la consideración del proyecto del Trienio actual (Macario y su equipo de liderazgo), presentado con unas expectativas coincidentes con las de Kúlüke y su equipo de liderazgo ahí en Roma, pronto en Nemi.
Y qué satisfacción vivir todo ello con una luz cada vez más definida, refiriéndonos a lo que significan estas siglas: LVD, los laicos que están optando por mantener e incrementar su carisma misionero.
Si tienen tiempo: Verbo Divino Gitano en Hungría