… Nuestra tarde ha discurrido por la Gran Vía que es y no es tanto como dice la prensa y la tele; una pena. La redacción de esta WEB hemos hablado más de 15 minutos con dos jóvenes policías municipales en servicio, a partir de las 5 de la tarde (véanse los telediarios).
Un policía:
¿Sabe? Barcelona no cierra el paso a los coches privados por lo mejor de su callejero; nosotros…
Parecía un lamento; y nosotros insistiéndoles a los dos polis simpáticos, amables, lo interesante que podría resultar para Madrid el que vinieran las y los del norte (holandesas y tal) y vieran a Madrid en bicicleta (familias al completo y tal), o sobre patines eléctricos de adultos; vamos, tomando posesión de la ciudad neurálgica para los peatones, miles en esta tarde de marras, pero que hoy por hoy muy respetuosos; veremos las fechas inmediatas a la navidad, si echan un pulso amigable a los taxis, millares, a los buses urbanos, a los coches particulares de los residentes.
Pudimos preguntarles a los polis, dada la conversación, ¿Vosotros poseéis una titulación universitaria? Y la respuesta fue positiva. ¿Y sois madrileños? De Toledo, de…
Que tengáis una tarde entretenida… ¿Y si la riada de las aceras y los pasos cebra invaden la calzada? ¿Tenéis orden de impedir…? – No (con sonrisas).
Ya en la redacción buscamos el resultado del clásico: empate a 1. Visto lo visto, debía de haber más gente, mucha más gente paseando las aceras que viendo el clásico. Como ocurre con la música clásica, audiencias valiosísimas pero minoritarias. Valga la comparación aunque forzada.