«Porque tuve hambre y me disteis de comer, tuve sed y me disteis de beber, fui forastero y me acogisteis.» (Mateo 25, 35). Fue con estas palabras del evangelio de Mateo con las que D. Carlos Osoro, el arzobispo de Madrid se dirigió a la comunidad cristiana que se reunió hoy en la Iglesia San Pablo en Vallecas para celebrar el día de los inmigrantes y refugiados.
Participaron también en la celebración varios feligreses de las tres capellanías atendidas por los misioneros del Verbo Divino en Madrid: la capellanía filipina, polaca y africana. Fue una celebración bonita, que estuvo animada por los coros de la comunidad parroquial de San pablo y la capellanía china. Se podía ver en la misma la universalidad de la Iglesia: varios rostros, de distintas nacionalidades pero unidos en la fe en Jesucristo. «Que nos miremos como hermanos» dijo D. Carlos en su homilía. «Inmigrantes y refugiados nos interpelan y la respuesta del evangelio ante esta situación es la misericordia, agregó el obispo. La celebración fue emitida por Radio Televisión Española (RTVE).