Laicos del Verbo Divino en reflexión: la pobreza y el evangelio hoy
César Paradas Montesinos – Comunicaciones SVD España
Misioneros Laicos del Verbo Divino, sacerdotes, religiosos y religiosas, provenientes de diversas ciudades de España y del mundo, reflexionan sobre la pobreza y el evangelio hoy, en el marco del “X Encuentro Misionero”, que se celebra durante este fin de semana en Dueñas-Palencia.
Las mesas de trabajo han sido estructuradas en grupos por las organizaciones convocantes: Sociedad Verbo Divino (SVD), las Misioneras Siervas del Espíritu Santo (SSPS) y los Laicos del Verbo Divino (LVD). “Con el propósito de reflexionar, compartir, y celebrar lo que nos dice el evangelio sobre el modelo de actuación de Jesús frente a la pobreza”, ha dicho Marcos Hernández, perteneciente al movimiento laical del Verbo Divino en España.
La jornada ha iniciado a las 10 de la mañana de este sábado 13 de octubre, con la oración a cargo de las hermanas SSPS, en la que se ha recordado -entre otras cosas- las bienaventuranzas recogidas en el evangelio de Mateo 5, 3-12, dando paso a la reflexión introductoria del tema central por parte del Hermano Óscar González (SVD).
“La pobreza, ese es el tema escogido para este año, un tema ante el cual el Papa Francisco ha mostrado su sensibilidad, estableciendo incluso para este 19 de noviembre, la Jornada Mundial de los Pobres y la Teología de la pobreza. En este sentido, los grupos que conforman las mesas de trabajo disertan sobre la pobreza en su entorno, analizando cuestiones como: ¿En qué nos sirve como modelo el comportamiento de Jesús con los pobres?, ¿Estoy realmente comprometido en ayudar a los pobres a mejorar su situación?, ¿Cómo lo hago?”, ha explicado González durante su intervención.
Los 120 participantes han sido distribuidos en seis grupos para desarrollar el análisis y posteriores conclusiones, las cuales deberán presentar en la puesta en común prevista para mañana domingo antes de la eucaristía de clausura, sin olvidar que, como ya es tradición, habrá paella para todos antes de despedirse de la Casa del Verbo Divino que cada año cede sus espacios para realizar el encuentro.
