
El descubrimiento del evangelio del encuentro
Por una enfermedad física, acudimos al hospital. Por un disfuncionamiento mental, nos dirigimos a un psicólogo. Por equivocaciones voluntarias en nuestras acciones o pensamientos, vamos a la confesión por medio de un sacerdote para reparar lo que estaba roto en nuestra relación con Dios y con el prójimo. ¿Qué hacemos cuando nuestros derechos no son respetados por causa de los maliciosos o circunstancias de la vida en este mundo herido? Seguramente, contestaríamos que buscásemos a un abogado, pero no todo el mundo tiene la posibilidad de tenerlo por falta de recursos financieros. Ante esta realidad, la iglesia en España intenta luchar a favor de los más necesitados, en particular en la diócesis de Sevilla, en colaboración con las Asociaciones de asistencia social. Con el mismo espíritu, los Misioneros del Verbo Divino no se queda indiferente respecto a este asunto y quiere aportar su granito de arena en la edificación del Reino de Dios. Además, intentando hacer realidad una de las dimensiones de la congregación, “Justicia, Paz e Integración de la Creación”, trabaja para que esta justicia sea efectiva entre todos. Ciertamente, la cuestión de la emigración no se aparta de este fenómeno. Me gustaría centralizar mi experiencia en la Asociación Casa de Todos, pero también me gustaría compartir mi experiencia pastoral parroquial.
Me llamo David Lapar, seminarista de la congregación del Verbo Divino, originario de la República Democrática del Congo. Hice la formación inicial en mi país, después de la profesión de los primeros votos, me enviaron a Kenia para estudiar la teología. Después de dos años de teología, opté por la provincia de España para hacer una experiencia transcultural (OTP). Desde mayo del año 2024, vivo en España, para hacer la experiencia, lo cierto es que, lo estoy pasando muy bien. Gracias a Dios.
Inicio en la Casa de todos
Fui destinado a la comunidad de Sevilla el 7 de julio de 2025 después de haber estado en la comunidad de Dueñas por un mes donde he tenido una experiencia gratificante con los cohermanos mayores de la comunidad. Mi primera impresión cuando llegué a Sevilla era darme cuenta de la riqueza de “la humanidad” que tienen los andaluces en general y, en particular, los feligreses de nuestra parroquia, Nuestra Señora del Carmen. Los comienzos en la Asociación, como dicen los andaluces, no han sido «un pan comido», en el sentido de que todo es nuevo para mí. Asimismo, el acento andaluz me crea alguna dificultad. Estas son las actividades a las que se dedica la Asociación Casa de Todos:
-
-
-
- Catering Social,
- Orientación laboral,
- Formación para adultos,
- Refuerzo Escolar,
- Escuela de Verano,
- Actividades de ocio y tiempo libre saludable,
- Y atención a la población inmigrante.
-
-
Mis compromisos en la Casa de Todos como voluntario
Teniendo en cuenta mis actividades parroquiales, en la Asociación he optado por el programa Atención a la población inmigrante. Esta elección personal es para ayudar a los emigrantes que tienen dificultad de comunicación, sobre todo, los de África habida cuenta de las habilidades lingüísticas que manejo: francés, inglés y español. Así que mi presencia es un apoyo importante para poder facilitar la atención a las personas los lunes, miércoles, y viernes a partir de las 9:30 a las 10:30 de la mañana sin cita y, su vez, de las 10:30 a la 1:30 de la tarde con cita. No obstante, los emigrantes de Latinoamérica no encuentren tanta dificultad porque ya hablan español.
Con la ayuda de los profesionales de la Asociación, he llegado a facilitar algunas tareas administrativas después de haber pasado un tiempo de observación y aprendizaje, por lo que ahora puedo ver, escuchar, y preguntar en caso de duda. Como dijo la profesional que «estas tareas se aprenden practicando”. Pues, hasta el momento realizo las tareas para ayudar a solicitar citas en diversas oficinas de administración de la Junta de Andalucía, a hacer o preparar currículo = Curiculum con la app Canva, la vida laboral, etc. pero, aún así sigo aprendiendo porque considero que hay muchas cosas por descubrir.
Percepciones de la experiencia en la Asociación
El poco tiempo que llevo trabajando como voluntario en la Asociación, he aprendido muchísimas cosas o realidades que la gente vive en la sociedad. Destaco lo siguiente:
- La Atención a la gente. Es la clave en la acogida. Y, es increíble ver como los profesionales y voluntarios prestan atención a las personas. Es su mayor alegría. Yo creo que solamente la atención a base de preguntas-respuestas entre el profesional y el usuario, este se siente ya atendido de su problema o demanda. Así se ve una persona que se emociona al principio al contar su situación y, por consiguiente, sale con una sonrisa, al despedirnos con alegría y energía, diciendo: «Muchas gracias.» o «Hasta luego». ¡Qué maravilla!
- Ayuda económica para las personas con pocos recursos. Aunque sea poco, pero alivia el yugo de la situación de la persona. Esta ayuda se da para los que tienen dificultades económicas. Así que a través de IMV (Ingreso Mínimo Vital), los acompañamos para pedir a la administración esta ayuda.
- Facilitar la Integración social. La Asociación no ofrece directamente la comida a los que necesitan, sino que a través del programa Cáterin = Catering Social subvencionado por la Junta de Andalucíaía, da la comida a unas centenas familias diarias. Pero para poder acceder a este programa, la Asociación pide unos documentos como el empadronamiento, DNI/ NIF, o NIE.
- El reconocimiento de los derechos de la persona. No hay mayor gesto de acompañamiento que el de rescatar a alguien en sus derechos especialmente al que no tiene nadie para defender sus derechos. Es la situación en la que se encuentran algunas personas, en su mayoría los jubilados y los que están en una situación de paro. Puede ser de la pensión, del Ingreso mínimo vital, o cualquiera otra ayuda del gobierno. Así que la Asociación acompaña a estas personas para revindicar sus derechos a cobrar lo justo o lo debido.
- El yugo de la injusticia social hacia las personas débiles. Algunas personas encuentran en situaciones en las que no saben cómo defenderse y llegan a Casa de Todos para a pedir ayuda. En algunos casos llegan por el tema de la vivienda. Es decir, el propietario de la vivienda abusa o se aprovecha del inquilino. Lo que es ilegal. En esta situación, la Casa de Todos interviene para ayudar a la persona.
- La búsqueda del empleo. La Asociación acompaña a la persona no sólo por ayudas económicas, sino también para buscar un trabajo digno. De este modo, nos encargamos a buscar empleo en diversas instituciones a través del programa, ERACIS+ (Programa “Itinerarios de Inclusión Social de empleo). Además, no nos limitamos solamente a la búsqueda del trabajo, sino también al seguimiento hasta que la persona llegue a tener un trabajo asegurado.
Actividades pastorales extra
Hay una buena colaboración entre la parroquia y la asociación Casa de Todos, especialmente a través de Cáritas muchas personas del barrio reciben ayudas necesarias. El grupo de Sembradores, en el que soy también es un miembro, que se dedican a preparar alimentos o comida todos los jueves para repartir a las personas sin techo que se encuentran en varios puntos de la ciudad de Sevilla. La atención no solamente es material, es decir, dar de comer o beber, sino también de escuchar, de dialogar, y ofrecerles una actitud empática.
De esta manera se percibe la alegría que expresan las personas que acompañamos. A mí me emociona mucho cuando me detengo a escuchar la historia de vida de algunas personas que atendemos. Una de las experiencias es de una persona con nombre y apellido que nos había comentado que había visitado muchos países durante su juventud, incluso había ido a Kenia. Pero, por circunstancias de la vida se encuentra ahora en la calle. Huyó de su hermano que quería hacerle daño, y llegó a España para refugiarse aquí. Lamentablemente, se trata de una historia muy triste. Lo que llama la atención es la sonrisa y alegría que nos regala cada vez que nos encontramos.
La aportación de los cohermanos en Sevilla
Yo estoy contento de ver el trabajo que están haciendo los cohermanos de la comunidad de Sevilla, y muy orgulloso de mi aportación para aliviar el trabajo que tienen sobre todo en esta etapa importantísima de mi formación misionera. El trabajo noble, el apostolado, el compromiso de los cohermanos en Sevilla hacen que la presencia de los Misioneros del Verbo Divino sea destacable y necesaria sobre todo en la Delegación de inmigración y en colaboración con de la diócesis de Sevilla. Uno de los ejemplos de esta colaboración como parroquia misionera, era que el coro de nuestra parroquia fue invitado a cantar en la celebraciónón del Jubileo de los migrantes y refugiados el domingo 28 de septiembre de 2025 en la conmemoraciónón de la Jornada mundial del Migrante y del Refugiado, celebrada en la catedral de Sevilla, presidida por Monseñor Ramón Valdivia, obispo auxiliar de Sevilla, que dijo algo muy profundo durante su homilía que me llamo la atención: «Necesitamos vuestra alegría, esperanza, y coraje». Y, además, animó durante la celebración al coro de nuestra parroquia Nuestra Señora del Carmen, para seguir sembrando la alegría y esperanza en los corazones entristecidos.
Conclusión
Doy gracias a Dios por permitirme hacer esta experiencia del evangelio, del encuentro con los más desfavorecidos de la sociedad en Sevilla en este año de pastoral. Es verdad que no podemos terminar con la injusticia que hay en el mundo, pero, entendemos que, con pequeños gestos, o palabras positivas, o simplemente una presencia o conversación con alguien que no tiene nada para recompensarnos, Ya sea porque la sociedad lo descarta, pero a los ojos de Dios tienen mucho valor. Dicen que “el mejor regalo para dar a alguien que uno ama es ofrecerle su tiempo”. Asimismo, es tan hermoso escuchar lo que sale de la boca de algunas personas sin techo después de visitarles, “Muchísimas gracias o que Dios os lo pague”.
Esta experiencia me hace comprender que no solamente la Iglesia y la Congregación nos necesitan, sino la Sociedad entera. Animo a que todos trabajemos con ella y para ella, juntos laicos y consagrados en la viña del Señor.
(Lapar David)



