Mini proyecto «Verano 2021»

OBRA DE RECLUTAMIENTO Y PROTECCIÓN DE NIÑOS Y NIÑAS DE LA CALLE

REPÚBLICA DEMOCRÁTICA DEL CONGO

La Obra de Reclutamiento y Protección de niños y niñas de la calle, ORPER en su sigla francesa, fue fundada en 1981. Originalmente, fue una respuesta dada a una decena de jóvenes de la calle que acudieron a la parroquia de Cristo Rey en Kinshasa para pedirle al misionero del Verbo Divino, P. Frank Roelants, belga, que los acomodara allí para escapar de los soldados que, por la noche, los buscaban para alistarlos en el ejército. Acostumbrados a dormir al aire libre en la calle, sólo pedían permiso para dormir en un campo de baloncesto, para estar un poco más seguros.

A medida que se deterioró la situación socioeconómica en Kinshasa, aumentó el número de niños en las calles. ORPER decidió entonces redoblar sus esfuerzos abriendo centros de acogida.

Tenemos 5 centros de acogida, 3 cerrados y 2 abiertos, uno para niños y otro para niñas.

En los centros abiertos, los niños o niñas viven en la calle, y vienen a este centro para ducharse, para comer, y recibir unas sesiones de concienciación.

En los centros cerrados, sin embargo, los niños y las niñas están totalmente bajo la responsabilidad de ORPER. Les proveemos la comida, les aseguramos los estudios y diversos tipos de cuidados.

MOTIVO Y OBJETIVOS

ORPER tiene   como  objetivo   la protección  y reinserción  familiar y socio-profesional de los de- nominados  niños de la calle, sin distinción de sexo, raza o religión. Porque el lugar adecuado para cualquier niño es la familia. Para lograrlo, ORPER se ha marcado dos objetivos: a) Apoyo y mejora de las condiciones de vida de los llamados niños de la calle; b) Me- diación, reinserción familiar  y / o integración socio-profesional, con alojamiento y escolarización.

La misión de ORPER es de dar respuesta a las malas condiciones de vida y las necesi- dades básicas de miles de niños que han elegido las calles de Kinshasa como sus hoga- res. Un vehículo recorre una treintena de lugares en las calles para entrar en contacto con ellos. ORPER entra en contacto con más de 2.500 niños, niñas y niños, por año. Nuestra institución quiere ser un lugar de esperanza para ellos.

Mientras intentamos negociar el retorno del niño/a a su familia; les llevamos a todos a la escuela para estudiar. A quienes ya no pueden seguir el currículo escolar, les ofrece- mos formación profesional en nuestro centro de formación ORPER. Tienen tres opciones: artes culinarias, corte y costura, y peluquería y estética. La primera actividad  de todo niño y toda niña en nuestro centro es que estudie.

ORPER, para su buen funcionamiento  recibe varios apoyos de la gente de buena vo- luntad. Vivimos de la generosidad y dones de muchas personas. En los centros cerrados dar de comer a más de 120 niños y niñas al día, asegurar sus estudios y su buena salud supone un gran presupuesto. Pero además les damos de comer, descanso y duchas a quienes llegan a nuestros hogares.

Nuestros mayores gastos son para cubrir las necesidades en Comida; en Medicinas y Escuela. A pesar del daño causado por el COVID-19 a nivel mundial, nos atrevemos a so- licitar vuestra generosidad para poder seguir ayudando a los niños y niñas de la calle de Kinshasa. Nuestras humildes oraciones os acompañan.

Os agradecemos anticipadamente vuestra ayuda. Que Dios os bendiga.

P. Ange-Albert Kufwakuziku, svd

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