En Familia
Aprender jugando
La diócesis de Añatuya es una de las más necesitadas y pobres de Argentina. Su territorio es de 68.000 Km2, y no hay en ella ninguna fábrica ni universidad. La gente, sencilla y hospitalaria, vive muy pobremente de lo poco que produce el campo en una zona casi desértica: maíz, algodón, calabazas, sandías, leña de la cual fabrican algo de carbón y con malas carreteras que dificultan el transporte.
Quienes más sufren son los niños, que carecen de lo más elemental para su formación. En ellos ponemos nuestra mirada. Deseamos dotarles de algunos materiales creativos-pedagógicos para su formación integral. Son muchas las carencias en sus familias, incluso en las escuelas rurales.
Nuestro objetivo: Que los niños y niñas aprendan jugando. Con poco se puede dar mucha felicidad. Por experiencia sabemos que la educación será la mejor inversión de sus vidas.
Responsable
Misionero del Verbo Divino, en la diócesis de Añatuya, provincia de Santiago del Estero. Su actividad, amplia y generosa, ha estado marcada por su dedicación comprometida en la educación y formación. Actualmente es ecónomo de la diócesis.
Actividades
- Apoyo a las escuelas infantiles con materiales didácticos para que los niños aprendan jugando.
- Relación organizada y estrecha con las familias de los niños.
Beneficiarios
170 niños y niñas de varias escuelas infantiles.